jueves, 5 de mayo de 2016

El vocativo, diferencias entre aún y aun y vaya, baya y valla

¡Hola, hola! ¿Cómo estáis? ¿Alguna novedad? Esta semana os traemos dos cuestiones muy breves pero que consideramos que son fundamentales en nuestro día a día: el vocativo, las diferencias de uso entre aun y aún y entre vaya, baya y valla. Muchos creerán que son temas más o menos sencillos, pero nunca viene mal refrescar este tipo de información, y para aquellos que no lo sepan seguro que les parece muy interesante.

Comencemos primero con el vocativo:

El vocativo

Se trata de un tema que mucha gente utiliza mal. Lo primero de todo, ¿qué es el vocativo? El vocativo es el receptor (o receptores) del mensaje de la oración y, como no forma parte de esta, se lo incluye entre comas. Se utiliza siempre en segunda persona del singular en oraciones donde no está el pronombre personal (tú, vosotros, usted, ustedes), sino un sustantivo (común o propio) que lo sustituye. En la frase ¿Qué quieres tú de cenar? no hay vocativo, pues está el pronombre personal de segunda persona. Sin embargo, en la oración Cariño, ¿qué quieres de cenar? sí, porque cariño sustituye a tú.

El vocativo puede ir en tres posiciones:

·         Al inicio de la frase, en cuyo caso lo sigue una coma: Miguel, ven a la cocina.

·         En medio de la oración, en cuyo caso lo precede y lo sigue una coma: ¿Te importaría, Marta, venir un momento, por favor?

·         Al final, en cuyo caso lo precede la coma: ¿Qué os apetece hacer hoy, chicos?

Esto mismo afecta también a las situaciones de comunicación en las que saludamos a alguien: Hola, Ana; ¿Qué tal estás, pequeño? Pues el interlocutor se dirige directamente a la persona que menciona y no está el pronombre personal (se escribe ¿Qué tal estáis vosotros? Y no ¿Qué tal estáis, vosotros?*)

En resumen, cuando os dirigís a alguien y no utilizáis un pronombre personal de segunda persona, debéis usar el vocativo entre comas.

AUN y AÚN

            Aún con tilde puede significar dos cosas: todavía o hasta.

            Según la RAE, se escribe con tilde «cuando pueda sustituirse por todavía» (Es pronto aún) y sin él «en los demás casos» (Aun cuando llueve, se va a pasear con el perro).

            Según esta misma institución los significados son los siguientes:

 
Aún
Definición
Ejemplos
Hasta un momento determinado
Todavía está durmiendo
Sin embargo
Es muy hipócrita, pero todavía me cae bien.
Sentido concesivo
¿Para qué haces dieta?; todavía si tuvieras sobrepeso estaría justificado
Sentido de encarecimiento
Leo es todavía más inteligente que su hermana
Aun
Definición
Ejemplos
Encarecimiento en sentido afirmativo o negativo
Te daré un trozo de chocolate y aun dos si quieres. No tengo yo tanto, ni aun la mitad

 
A continuación os mostramos un vídeo de la Fundación del Español Urgente (Fundéu) que resume en menos de cuarenta segundos lo que acabamos de decir de una forma muy gráfica:
 
VAYA, BAYA y VALLA

Cuando oímos estas tres palabras lo primero que nos viene a la mente es «Vaya del verbo ir, la baya es un fruto y la valla, un vallado», pero también tienen otros significados, ¡véamoslos!

Vaya puede denotar varias cosas:

·         burla o mofa. ¿Ustedes lo utilizan con este sentido?;

·         interjección para comentar algo que gusta o que decepciona (He aprobado el examen de conducir. ¡Vaya! Elisa está enferma, no puede ir a clase. ¡Vaya!);

·         delante de un sustantivo, en oraciones exclamativas, enfatiza las características que se le atribuyen a algo o a alguien (¡Vaya castillo tan grande!);

·         delante de la preposición con y de un sintagma nominal «marca la actitud, favorable o desfavorable del hablante, matizada muchas veces de ironía, ante la persona o cosa designada por dicho sintagma (¡Vaya con el niño! ¡Vaya con la musiquita!)» (Diccionario de la Real Academia Española).

 Baya, aparte del significado que ya hemos dicho, también significa matacandiles (una planta)..

 Y por último, valla, puede ser:

·         vallado para defensa;

·         cartel con fines publicitarios;

·         obstáculo que han de saltar algunos deportistas en algún tipo de competiciones, como en las carreras de caballos o carreras con obstáculos.

 

En la siguiente imagen encontraréis un breve resumen de las diferencias de estas tres palabras:
 

¡Eso es todo por hoy! ¿Qué os ha parecido la entrada del blog? Por favor, no seais tímidos y comentad, ¡estamos deseando saber qué pensáis!

 

S2

martes, 3 de mayo de 2016

El castellanoleonés y el extremeño

¡Hola a todos y a todas! Seguimos con nuestros dialectos del español. Hoy os traemos dos: el castellanoleonés y el extremeño. ¡Comencemos!

EL CASTELLANOLEONÉS

El castellanoleonés, también conocido como español leonés o español de León es el dialecto que se habla en Castilla y León. Se habla en la mayor parte de Salamanca, Zamora y León. Este dialecto procede de la evolución del español en la región de Castilla y León y surgió por la fusión del español que llevaban nativos de otras regiones y por la lengua leonesa autóctona que se hablaba en la región. El dialecto ha conservado mejor sus rasgos propios frente al español general en el ámbito rural leonés y tiene tres variedades: norte, centro-occidental y sur.

 Autores castellanoleoneses

Como no podía faltar en una de nuestras entradas sobre dialectos, os recomendamos a un autor de la zona, Gustavo Martín Garzo. Gustavo Martín Garzo es un escritor vallisoletano que ha colaborado en medios de comunicación españoles tales como El País. Además, ha publicado obras muy conocidas como Las historias de Marta y Fernando o Donde no estás.

EL EXTREMEÑO

El extremeño, también conocido como castúo, es el nombre que recibe la variedad idiomática del español que se habla en Extremadura. Se le llama también castúo por el poeta Luis Chamizo Trigueros, que intentó reflejar, en su obra El Miajón de los Castúos, el habla rural que definió como «castizo, mantenedor de la casa de labradores que cultivaron sus propias tierras». Así, se extendió esta denominación al dialecto de la zona.

Algunos estudiosos creen que el español que se habla en Chile está influido por este dialecto por su gran parecido en la entonación, pronunciación y algunas expresiones. Puede parecer una locura pero esta hipótesis tiene apoyo histórico, pues los primeros conquistadores de Chile venían de Extremadura.

Los dialectólogos han considerado este habla como lengua de tránsito y también es cierto que, desde una perspectiva estructural y regional se podría incluir en el castellanoleonés que acabamos de describir.

Literatura en extremeño
Cada vez más poetas y escritores utilizan el castúo como lengua para publicar sus obras, por lo que podemos encontrar libros en el mercado como Ceborrincho, relatos extremeños o Mamaeña, relatos extremeños, ambas obras de Miguel y Elisa Herrero Uceda.
También os aconsejamos una escritora, Dulce Chacón, autora de la novela La voz dormida, llevada al cine en 2011. De ella nos gusta su compromiso social y político, la forma de la que declara las injusticias de la guerra y su espíritu luchador, pues pertenecía a la asociación Mujeres contra la Violencia de Género.
Bueno, ¿qué os ha parecido? Sabemos que esta entrada ha sido más corta que en otras ocasiones, pero son dialectos con menos difusión que los que hemos tratado hasta ahora. ¡Esperamos que os haya gustado y que no dejéis de visitar nuestro blog! ¡Hasta el jueves!
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jueves, 28 de abril de 2016

El andaluz

El andaluz es una modalidad del español o castellano, usada por un determinado número de personas, que posee algunos rasgos de esa lengua pero no cuenta con una literatura escrita. Por tanto, no ha llegado a alcanzar la categoría de lengua. Los andaluces, a la hora de escribir, lo hacen usando el sistema de la lengua española.
El día que el andaluz se escriba de la misma manera que se habla, habrá alcanzado esa categoría de lengua.
También podríamos usar el término de habla andaluza, entendiendo por tal, el uso que los andaluces hacen del sistema de la lengua española. Pero, al no haber un código del andaluz común para todos los andaluces, es preferible hablar de dialecto andaluz.
Ahora veamos los principales fenómenos que se dan en el dialecto andaluz:
En este dialecto se producen algunos fenómenos a todos los niveles gramaticales (fonológico, morfológico, léxico y sintáctico) que son propios de esta variante. Los más sobresalientes son:
1.      El seseo
2.      El ceceo
3. Omisión de la "s" medial y final
4. Omisión de la "d" en terminaciones "ado", "ido"
5. El yeísmo

De una manera breve y, al mismo tiempo asequible a todos, vamos a explicar en qué consisten estos fenómenos.
Ø  El seseo – Consiste en pronunciar la "c" como "s". Así, por ejemplo, "sine", en lugar de cine, "sapato", en lugar de zapato, "servesa", en lugar de cerveza, etc.
Ø  El ceceo – Es el fenómeno contrario, es decir, pronunciar la "s" como "c". Así, "cevilla", en lugar de Sevilla, "ceñor", en lugar de señor, etc.

En la actualidad el seseo se en algunos lugares de Sevilla, en el sur de la provincia de Córdoba y en algunos pueblos malagueños y jienenses, que están próximos a la provincia cordobesa.

El ceceo ocupa una zona más amplia, pues se da en la provincia de Huelva, en Cádiz, en casi toda la provincia de Málaga y de Sevilla y en casi toda la provincia de Granada, ya que, en la parte oriental de esta última provincia, se distingue la "c" de la "s", distinción que se da en el resto de Andalucía.

Se suele decir que los andaluces se comen las "eses". Lo de comer podría interpretarse como una hipérbole, porque, lo que es comer, no se comen nada. Lo que ocurre es que los andaluces no pronuncian ni las "eses" en situación medial de palabra, ni tampoco, en situación final.

Y no es por gusto, sino porque la evolución del castellano en estas tierras, ha dado lugar a que se dé esta circunstancia que, por supuesto, tiene su explicación

Cabría hacerse la siguiente pregunta: ¿es que en Andalucía se habla mal? Y aún se podría hacer otra segunda pregunta: ¿en dónde se habla el mejor castellano?

Las dos preguntas tienen sus respectivas respuestas: A la primera cuestión, habría que responder que en Andalucía no se habla mal, sino que, por diversos motivos, el castellano ha evolucionado en esta región de una manera diferente a como lo ha hecho en otras regiones.

Y a la segunda pregunta, hay que responder diciendo que debería formularse de otra manera. Se debería preguntar ¿en dónde se pronuncia el mejor castellano?

Ocurre lo siguiente: una cosa es pronunciar mejor o peor una lengua, atendiendo al subsistema fonológico, y otra cosa muy distinta es hablar una lengua. Hablar bien una lengua es conocerla, tener un amplio vocabulario, saber construir las frases con corrección y tener una buena expresión, independientemente de cómo sea nuestra pronunciación. Por este motivo, la respuesta a la segunda pregunta sería que no hay una zona concreta de la que se pueda decir que, en ella, se habla el mejor castellano. Sí se puede decir que hay zonas en las que la pronunciación es la más correcta, entendiendo por correcta, la que se hace según la fonología del sistema de la lengua castellana.

Por tanto, diremos que el mejor castellano lo hablan las personas que tienen un dominio de la lengua bastante extenso, dicho de otra manera, el mejor castellano lo hablan las personas cultas, que conocen a fondo la fonética, fonología, semántica y sintaxis de la lengua.

En tanto sí podemos afirmar que hay zonas en las que la gente pronuncia un castellano correcto, porque se atienen al sistema fonológico auténtico.

El siguiente fenómeno que se da en el andaluz, es el de omitir la "d" en posición intervocálica y en las terminaciones verbales "ado" e "ido", fenómeno que no es exclusivo del andaluz, pues se da en otros dialectos.

El yeísmo, que no es exclusivo tampoco del andaluz, consiste en no distinguir, a la hora de pronunciar, entre "ll" y la pronunciación de la "y". A este respecto, hay que decir, que casi toda la Península es yeísta, salvo en las zonas en donde hacen la distinción de estos fonemas.

Concluiremos diciendo que el andaluz es un dialecto del español o castellano, que se habla en la Comunidad Autónoma Andaluza y que aún no ha alcanzado la categoría de Lengua.
 
Bueno, y eso es todo por hoy, ¿qué os ha parecido? Pronto os sorprenderemos con una nueva entrada. ¡Hasta pronto!
 
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jueves, 21 de abril de 2016

Diferencias entre aun y aún y vaya, baya y valla y vocativo

¡Hola, hola! ¿Cómo estáis? ¿Alguna novedad? Esta semana os traemos dos cuestiones muy breves pero que consideramos que son fundamentales en nuestro día a día: el vocativo, las diferencias de uso entre aun y aún y entre vaya, baya y valla. Muchos creerán que son temas más o menos sencillos, pero nunca viene mal refrescar este tipo de información, y para aquellos que no lo sepan seguro que les parece muy interesante.
Comencemos primero con el vocativo:
El vocativo
Se trata de un tema que mucha gente utiliza mal. Lo primero de todo, ¿qué es el vocativo? El vocativo es el receptor (o receptores) del mensaje de la oración y, como no forma parte de esta, se lo incluye entre comas. Se utiliza siempre en segunda persona del singular en oraciones donde no está el pronombre personal (tú, vosotros, usted, ustedes), sino un sustantivo (común o propio) que lo sustituye. En la frase ¿Qué quieres tú de cenar? no hay vocativo, pues está el pronombre personal de segunda persona. Sin embargo, en la oración Cariño, ¿qué quieres de cenar? sí, porque cariño sustituye a tú.
            El vocativo puede ir en tres posiciones:
·         Al inicio de la frase, en cuyo caso lo sigue una coma: Miguel, ven a la cocina.
·         En medio de la oración, en cuyo caso lo precede y lo sigue una coma: ¿Te importaría, Marta, venir un momento, por favor?
·         Al final, en cuyo caso lo precede la coma: ¿Qué os apetece hacer hoy, chicos? 
Esto mismo afecta también a las situaciones de comunicación en las que saludamos a alguien: Hola, Ana; ¿Qué tal estás, pequeño? Pues el interlocutor se dirige directamente a la persona que menciona y no está el pronombre personal (se escribe ¿Qué tal estáis vosotros? Y no ¿Qué tal estáis, vosotros?*)
En resumen, cuando os dirigís a alguien y no utilizáis un pronombre personal de segunda persona, debéis usar el vocativo entre comas. 
AUN y AÚN
Puede significar dos cosas: todavía o hasta.
Según la RAE, se escribe con tilde «cuando pueda sustituirse por todavía» (Es pronto aún) y sin él «en los demás casos» (Aun cuando llueve, se va a pasear con el perro).
Según esta misma institución los significados son los siguientes:

Aún
Definición
Ejemplos
Hasta un momento determinado
Todavía está durmiendo
Sin embargo
Es muy hipócrita, pero todavía me cae bien.
Sentido concesivo
¿Para qué haces dieta?; todavía si tuvieras sobrepeso estaría justificado
Sentido de encarecimiento
Leo es todavía más inteligente que su hermana
Aun
Definición
Ejemplos
Encarecimiento en sentido afirmativo o negativo
Te daré un trozo de chocolate y aun dos si quieres. No tengo yo tanto, ni aun la mitad

 
A continuación os mostramos un vídeo de la Fundación del Español Urgente (Fundéu) que resume en menos de cuarenta segundos lo que acabamos de decir de una forma muy gráfica:

 
VAYA, BAYA y VALLA

Cuando oímos estas tres palabras lo primero que nos viene a la mente es «Vaya del verbo ir, la baya es un fruto y la valla, un vallado», pero también tienen otros significados, ¡véamoslos!

Vaya puede denotar varias cosas:
·         burla o mofa. ¿Ustedes lo utilizan con este sentido?;
·         interjección para comentar algo que gusta o que decepciona (He aprobado el examen de conducir. ¡Vaya! Elisa está enferma, no puede ir a clase. ¡Vaya!);
·         delante de un sustantivo, en oraciones exclamativas, enfatiza las características que se le atribuyen a algo o a alguien (¡Vaya castillo tan grande!);
·         delante de la preposición con y de un sintagma nominal «marca la actitud, favorable o desfavorable del hablante, matizada muchas veces de ironía, ante la persona o cosa designada por dicho sintagma (¡Vaya con el niño! ¡Vaya con la musiquita!)» (Diccionario de la Real Academia Española).

Baya, aparte del significado que ya hemos dicho, también significa matacandiles (una planta)..

Y por último, valla, puede ser:
·         vallado para defensa;
·         cartel con fines publicitarios;
·         obstáculo que han de saltar algunos deportistas en algún tipo de competiciones, como en las carreras de caballos o carreras con obstáculos.
 En la siguiente imagen encontraréis un breve resumen de las diferencias de estas tres palabras:


 ¡Eso es todo por hoy! ¿Qué os ha parecido la entrada del blog? Por favor, no seais tímidos y comentad, ¡estamos deseando saber qué pensáis!

 

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lunes, 18 de abril de 2016

Fabla aragonesa


¡Buenos días a todos y a todas! Hoy os traemos otro dialecto español: la fabla, también conocida como aragonés. ¡Preparaos para descubrir cosas muy interesantes sobre ella!

La fabla es una lengua romance de la península ibérica que hoy en día hablan 11.000 en diversas zonas de Aragón, donde tiene estatus de lengua propia. Sobre todo se habla en el norte de la región, en los Pirineos, en comarcas como La Jacetania, Alto Gállego, Sobrarbe y la parte occidental de Ribagorza, y algo castellanizado en otras comarcas. En las partes más orientales, como el valle de Benasque, existen ciertas características típicas del catalán también. Existen varias variedades: el aragonés occidental, central, oriental y el somontanés o meridional. No obstante, la falta de referentes lingüísticos ha hecho que no haya una conciencia unitaria entre sus hablantes y se han conservado mejor los dialectos, como el ansotano (del valle de Ansó), el cheso (del valle de Hecho) o el chistabino (del valle de Gistaín), entre otros.
 
 
Algo de historia...
 
 
Al igual que todas las lenguas romances, la fabla viene del latín, y se formó en los valles pirenaicos aragoneses entre los siglos vii y viii. Durante la Edad Media adopta el nombre de aragonés medieval o navarroaragonés. Con la Reconquista se expandió el idioma y durante los siglos xiii y xiv alcanzó su mayor esplendor. Cuando el Condado de Barcelona se unió al Reino de Aragón y se formó la Corona de Aragón, el catalán y el aragonés ejercieron una influencia mutua. No obstante, con la llegada de la dinastía castellana de los Trastámara en 1412 el castellano se convirtió poco a poco en la lengua de la corte y nobleza del lugar; el aragonés quedó relegado a lengua de ámbito rural o doméstico.
Al igual que ha ocurrido con las otras lenguas y dialectos que hemos estudiado hasta ahora, tras la muerte de Franco, el aragonés se volvió a revitalizar y se crearon asociaciones defensoras y promotoras del mismo. No obstante, y a pesar de los esfuerzos de la gentey el aumento de estudiantes de fabla, las instituciones apenas lo apoyan.
 
Hoy en día...
 
En 2009 se aprobó la Ley de Lenguas de Aragón, en la que se decía que el aragonés era una lengua propia origianl e histórica de la región. Además, se daban unos derechos lingüísticos, como poder usarla oralmente y por escrito en las administraciones públicas aragonesas. Asimismo, en 2011 se formó la Academia de la Lengua Aragonesa.

En 2013, el parlamento autonómico derogó la ley anterior y aprobó una nueva, con el mismo nombre, con el objetivo de determinar los topónimos y nombres oficiales de la comunidad. El aragonés dejaba de tener este nombre y pasaba a llamarse lengua aragonesa propia de las áreas pirenaica y prepirenaica (LAPAPYP). Esta ley se derogó en septiembre de 2015 y el aragonés volvió a tener su nombre anterior.
Además, el Atlas Interactivo UNESCO de las Lenguas en Peligro en el Mundo lo considera como una lengua en peligro de extinción.
 
Literatura de Aragón
 
La lengua aragonesa nunca ha contado con el prestigio literario con el que cuentan las lenguas y dialectos de los que hemos hablado, por lo que es muy difícil encontrar literatura en aragonés.
No obstante, Aragón ha contado y cuenta con grandes escritores, como Ramón J. Sender, que escribió obras tan importantes como Crónica del alba o Réquiem por un campesino español.
 
Charramos fabla...
 
Como hemos hecho hasta ahora en todos los casos, a continuación os ponemos una serie de palabras en fabla y su traducción a español.

fabla
español
abentar
tirar
esboldregar
derrumbar
furo
animal sin domar
estozar
esnucar
zagal
chaval
alberge
albaricoque
pozal
cubo
¡jodo! (o su variante ¡jodo, floro!)
expresión de sorpresa
malfarcho
contrahecho, desgarbado
chugardito
aficionado al juego
yes
eres (tú)
zirgüello
ciruela


También os traemos el cuento de la lechera en aragonés, recogido de la obra Textos históricos dialectales, Manuel Alvar, Revista de Filología Española, Anejo lxxiii, Madrid, 1960. ¿Entendéis algo?

I cuan ya s'en iba su tío, le ba di la moceta: «Compre-me una craba pa yo, que m'en iré a bendé la leche a Gráus». I su tío la i ba comprá el día que s'en iba. I como la moceta iba dicho en casa: «m'en iré a bendé la leche a Gráus», ban pensá su pare i argüelo: «la de to-las crabas podría í a bendé esta moceta; nos tocarían buenos dinés». I la moceta ba dí entonces: «I a yo, que me darán de llebá la i?». «Como tiens una craba, te darén pa tu lo que saques un día de la semana».
Y ella se ba fé múi contenta; en ba í traén mucho tiempo, i con lo que le tocaba de cada semana, se ba comprá un pañuelo de sarja i un apretadó, y ba pensá ella: «Ora, ya tiengo prou ropa, i con lo qu'en saque ói de la leche, qu'en faré i m'en iré a Pruquemá, que tienen muchas gallinas i m'en compraré una; le posaré beintitrés güegos i me sacará lo menos beinte pollos; las pollas, me las dixaré en casa pa que posen i me benderé los güegos; los pollos, me los benderé en Gráus el día la fiesta, que los pagan milló qu'en to'l año, i me guardaré los dinés asta que me pueda comprá una baca, i la baca me parirá un nobillo; i con lo que mén saque del nobillo, de los güegos y de los pollos del otro año que posaré tres o cuatro llocadas, yo me compraré un campo, i la baca que m'abrá paríu otro nobillo, i los güegos i la leche que áiga bendíu, ya seré la más rica de toz estos llugás, i entonces sí que tendré nobios, pero me faré respetá i bendrá ixe Ramonón de la Terrazuela que e tan presimíu, i ya no me llamará Mariona, sino que me dirá: «Marieta, ¿te quiés casá con yo?». I yo le diré: «¿Ora biens con éstas?» No, aber beníu antes; ora, porque sói rica, me llamas Marieta, ántes siempre me llamabas Mariona; yo me quiero casá múi a gusto, m'en quiero í el día San Miguel a la feria, i pa ixo, me posaré bien maja, que aquel día acuden a Gráus to-los millós mozos que ñ'ai al rededó i me triaré al más guapo que béiga». I al dí esto, entrepuza en una pedra; se le cái el cantre i se le va fé peazos i adiós ilusiones!

Además, y para acabar con tan peculiar dialecto, os traemos una jota en cheso (la variedad que se habla en el valle de Hecho (o val d’Echo en fabla). A nosotras nos encanta, ¿qué os parece a vosotros?
 
Bueno, eso es todo por hoy, queridos amigos. ¿Qué os ha parecido la entrada? ¿Habéis estado alguna vez en Aragón y habéis escuchado alguna palabra que no conociais o habéis oído alguna vez hablar fabla? Contadnos vuestras experiencias, quejas, sugerencias, comentarios... ¡lo que sea! ¡Estaremos encantadas de leerlas!

S2